Mientras Honduras, Costa Rica, Nicaragua, Belice, El Salvador y Panamá afinan detalles para competir en la Copa Centroamericana que se jugará en Panamá del 13 al 22 de enero, Guatemala se queda en casa —suspendida de toda actividad internacional desde el 28 de octubre por la Fifa— y esperando los efectos negativos de no participar en la Copa Uncaf.
La FIFA ratificó una sanción económica y deportiva contra la Federación Nacional de Fútbol de Guatemala (Fedefut) después de los actos discriminatorios que se registraron durante el partido eliminatorio contra El Salvador, disputado el 14 de octubre en el Estadio Cuscatlán. El organismo rector del fútbol mundial, tras una investigación realizada por su Comité Disciplinario, determinó la responsabilidad de aficionados guatemaltecos en los incidentes ocurridos en las gradas del recinto salvadoreño. Como resultado, impuso una multa de aproximadamente 200 mil quetzales y ordenó la reducción del 15% del aforo para el próximo encuentro de Guatemala como local.
